Se ha escrito y dicho mucho sobre el ser amigo, sobre su significado, y no es casualidad, nada en realidad en este mundo, reconforta, aporta, da tanto de forma incondicional como la amistad.
Creo que toda amistad se sustenta en valores, especialmente en algunos que le son fundamentales: la honestidad y la lealtad. En relación al primero creo que los verdaderos amigos se dicen siempre las cosas de frente, nunca a espaldas.
Por otro lado un amigo es leal, no traiciona; por ejemplo si le ofrecen el puesto de su amigo, sólo lo toma si el otro está de acuerdo. Vive la fidelidad, que es una forma de lealtad, pero de forma auténtica, profunda, sin presiones.
Por ello mis dos grandes lemas con los que trabajo día a día son la fidelidad, está tomada como guía de mi gran amigo: el gobernador del estado Fidel Herrera Beltrán, y el decirle a la gente, a mis amigos: cuentas conmigo, que es la mejor expresión que un amigo le puede hacer a otro.
Sé que aquí en el Facebook y en las redes sociales, comienza uno a tejer una gran red de amigos, y que aprovechando el poder de este vehículo de comunicación se amplían los horizontes de la amistad. Por eso, aprovecho este medio para desearles a todos un muy feliz día del amor y la amistad, en el que espero compartan plenamente todo su cariño con aquellos que más aprecian y valoran.
Yo sólo te digo que cuentas conmigo, que cuentas con tu amigo Javier Duarte para apoyarte y compartir tus proyectos y metas, ya que me gusta comprometerme con los sueños de los demás para lograr los propios.
Tu amigo:
Javier Duarte de Ochoa
Y a modo de regalo te dejo este poema de Mario Benedetti, que considero es especial para esta época del año dedicada al amor y la amistad, para que lo compartas con quien amas, o con todos aquellos a los que quieras manifestarles tu aprecio. Yo en lo personal se lo dedico a mi esposa:
Hagamos un trato
Cuando sientas tu herida sangrar
cuando sientas tu voz sollozar
cuenta conmigo.
(de una canción de Carlos Puebla)
Compañera,
usted sabe
que puede contar conmigo,
no hasta dos ni hasta diez
sino contar conmigo.
Si algunas veces
advierte
que la miro a los ojos,
y una veta de amor
reconoce en los míos,
no alerte sus fusiles
ni piense que deliro;
a pesar de la veta,
o tal vez porque existe,
usted puede contar
conmigo.
Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo,
no piense que es flojera
igual puede contar conmigo.
Pero hagamos un trato:
yo quisiera contar con usted,
es tan lindo
saber que usted existe,
uno se siente vivo;
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos,
aunque sea hasta cinco.
No ya para que acuda
presurosa en mi auxilio,
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.
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