Atender a la gente, la prioridad en este momento: Javier Duarte

Se buscarán diversas alternativas para reparar los daños

Boca del Río, Ver., 21 de septiembre de 2010.- Hay que garantizar la alimentación y cobijo de los damnificados porque, en este momento, la prioridad es cubrir sus necesidades básicas, dijo el gobernador electo Javier Duarte de Ochoa y agregó que antes de los trabajos de reconstrucción se debe procurar la seguridad y la salud de los afectados.

Al realizar un recorrido por colonias inundadas de Veracruz y Boca del Río para entregar víveres a las víctimas del paso del huracán Karl, Duarte de Ochoa consideró que el apoyo de la sociedad para aportar víveres no debe decaer porque nos mantenemos en emergencia.

“Como sociedad veracruzana con una amplia capacidad de organización, tenemos que reunir la mayor cantidad de insumos, pues hay miles de personas que esperan de nuestra ayuda para poder comer, para hacerse un cambio de ropa y yo les pido que no dejemos de apoyar, sobre todo a los niños, a los bebés que requieren leche y pañales suficientes”, expresó.

Duarte de Ochoa comentó que las brigadas de atención a los damnificados permanecerán activas en los municipios devastados por el desbordamiento de ríos, y por la concentración de agua en zonas que hacía años no representaban alto riesgo para los asentamientos humanos.

El gobernador electo manifestó que hasta concluir la emergencia en cada una de sus etapas, se podrá hablar del tema de la reconstrucción y que en su caso atenderá puntualmente a partir del 1 de diciembre para continuar con los trabajos que inicie el gobernador Fidel Herrera Beltrán.

En sus recorridos por las colonias afectadas, las personas se acercaron para agradecer la ayuda y expresar sus necesidades, a ellas les dijo que tengan confianza porque el Gobierno del Estado seguirá apoyándolos como lo hace hasta ahora.

El gobernador electo expresó que apenas entre en funciones se continuará con los trabajos de reconstrucción, y dijo que no hay presupuesto que alcance para enfrentar solos el reto de restaurar miles de viviendas destruidas total o parcialmente, así como de reubicar a las víctimas, por lo que será necesaria la combinación de recursos de los tres órdenes de gobierno, además de otras alternativas de financiamiento para superar los daños.